Hay un dicho muy conocido que dice “hay que guardar pan para mayo”, obviamente en alusión a que es necesario guardar recursos con la finalidad de poder consumirlos en el futuro ante una adversidad o alguna necesidad. Pero ahora no solo basta guardar o ahorrar una determinada cantidad de dinero para poder usarla en el futuro, sino que también hay que tener en consideración la moneda “divisa” en la cual debemos de ahorrar para no tener contratiempos en el futuro y sacarle el máximo provecho a nuestro dinero fruto de nuestro trabajo y esfuerzo.
En los años 80́s la hiperinflación en el Perú mostraba nuestras debilidades e incluso incrementaban día a día la incertidumbre para los inversionistas nacionales e internacionales que no apostaban por el Perú por la debilidad de nuestra moneda y nuestra economía. En esos años el Sol Peruano era considerado una divisa exótica, ya que era una divisa que no tenía en sí ni confianza ni estabilidad, esta divisa era comparada con el Peso Boliviano, el Peso Argentino entre otras; es por ello que era mejor ahorrar en una moneda “fuerte” en una moneda “refugio” como el dólar americano con la que las grandes empresas, los agentes económicos, las personas de a pie puedan ahorrar sin ver que su dinero se deprecie o dicho de otra manera que su dinero no pierda valor.
Hoy en día, al pasar los años y gracias a las políticas de estabilización macroeconómica y crecimiento que se iniciaron en los años 90´s hacia adelante esta realidad ya ha cambiado. En los últimos años el crecimiento sostenido en nuestra economía nos ha mostrado ante el mundo como un país en donde nuevas inversiones de corto, mediano y largo plazo resaltan la confianza en nuestra economía. Los factores macroeconómicos como la política fiscal, política monetaria y la apertura de los mercados nos han permitido conseguir la fortaleza y la estabilidad que nuestra divisa necesita. Una debilidad a tener en consideración es la coyuntura política, que estamos afrontando en estos momentos y que impactan de manera negativa en nuestra economía, mientras que una fortaleza a tener en consideración es la estabilidad que desde hace 25 años nos da el BCRP gracias a su independencia y criterio técnico en cuanto a inflación y política monetaria se refiere.
Adicionalmente, cabe señalar que las divisas refugio en realidad son aquellas en las que las personas y empresas confían para disminuir su exposición ante la inestabilidad en los demás mercados. Es por ello, que podemos decir que el Sol Peruano es considerado como el “nuevo dólar” por los países vecinos, básicamente por su fortaleza.
Hay que tener en consideración que la coyuntura política y social que vive nuestro país durante el último año, no ha mermado en la fortaleza de nuestra moneda, más por el contrario se ha fortalecido aún más. Caso contrario son los países vecinos en donde las políticas comunistas y aunado a lo sucedido con la pandemia del covid 19 ha contribuido a la devaluación de sus moneda y la inestabilidad macroeconómica; impactando de manera negativa en su economía y por ende en su moneda.
Es tiempo del Sol Peruano, divisa que gracias a sus políticas de estabilización y crecimiento se presenta como alternativa de ahorro e inversiones gracias a su fortaleza.
Artículo elaborado por: Econ. Alfonso R. Salazar Guevara.
